Si recordáis un bizcocho clásico de cuando eráis pequeños y lo echáis mucho de menos tenéis que probar esta receta… A mí me ha teletransportado años atrás y, por supuesto, me ha encantado! Igual no es el que buscáis pero veréis que tiene una miga súper jugosa que igualmente os hará disfrutar muchísimo. 😃
Con las medidas que os dejo sale un bizcocho bajito como veis en las fotos, a mí me venía perfecto para lo que lo quería preparar pero si preferís hacerlo más grande se pueden doblar las cantidades perfectamente. Eso sí, habrá que dejarlo un rato más en el horno para que se haga bien y listo.
¡Os dejo a continuación toda la información para que veáis lo sencillo que es hacerlo en casa!
INGREDIENTES:
- 110gr Harina
- 200ml Leche
- 50ml Agua Caliente
- 100gr Azúcar Moreno
- 75ml Aceite Girasol
- 8 gr Levadura
- 1/4Cdta Sal
- 3 Huevos L
- 60gr Cacao Puro en Polvo
- 1 Cucharadita Esencia Vainilla
Cobertura:
- 100gr Chocolate Fondant
- 75ml Leche
- 1 Cucharada Mantequilla
- Para Decorar: Sprinkles, Chocolate blanco rallado…
ELABORACIÓN:
- Comenzamos precalentando el horno a 190ºC, así lo tendremos listo cuando vayamos a introducir el bizcocho.
- Engrasamos un molde con chimenea central para que se haga bien y quede jugoso.
- En un bol, tamizamos la harina junto a la sal, la levadura y el cacao. Lo reservamos.
- Batimos los huevos y el azúcar con una batidora de varillas (o a mano si lo preferís) hasta que doble su volumen. A continuación añadimos el aceite y batimos hasta que se integre.
- Incorporamos ahora un tercio de la mezcla de harina y mezclamos ligeramente. Añadimos la leche y la vainilla e integramos.
- Volvemos a incorporar otro tercio de la mezcla de harina y seguidamente el agua caliente. Integramos, añadimos la mezcla de harina restante y batimos a velocidad baja hasta que quede una masa homogénea.
- Lo vertemos en el molde y lo llevamos al horno unos 30 minutos o hasta que al pinchar con un palillo este salga limpio.
- Sacamos del horno cuando esté hecho y dejamos templar en el molde sobre una rejilla. Unos 10 minutos más tarde desmoldamos con mucho cuidado (es frágil) y dejamos enfriar totalmente sobre la rejilla.
- Mientras se enfría, fundimos el chocolate con la leche al baño maría, retiramos del calor y añadimos la mantequilla, sin parar de mover hasta que se integre. Vertemos sobre el bizcocho ya frío.
Si os gusta el chocolate caliente, podéis tener listo el bizcocho con antelación y preparar el glaseado en el momento en que os lo vayáis a comer. ¡Veréis qué sensación!
¡Espero que os haya gustado! Y ya sabéis, si os animáis a probarlo espero vuestros comentarios e impresiones por aquí o por mis redes sociales (Instagram y Facebook). Un beso y gracias por pasaros!! 😘
