Antes de nada, ya que este es el primer post del año… ¡Aprovecho para desearos muy 2023 a todas esas personas que os pasáis por aquí para leerme! Os deseo mucha salud, muchos momentos buenos disfrutados de la forma que más os guste y por supuesto muchas recetas deliciosas.
Llevo mucho tiempo queriendo preparar un chocolate a la taza más casero, pero al final siempre lo he ido dejando para el último día y, claro, tiro de lo sencillo… Pero este año ya tocaba hacer algo diferente. Hice una prueba y me gustó mucho el resultado, y como encima es muy sencillo, decidí que era buena opción compartirlo con vosotros.
Os dejo a continuación todas las indicaciones, ¡preparad papel y boli!
INGREDIENTES:
- 400 gr Chocolate Fondant (yo usé del 50%)
- 125 ml Leche
- 750 ml Nata Fresca (o, en su defecto, nata de montar)
- 1/2 cucharadita Canela en Polvo
- 2 cucharadas Azúcar Glas
- 1 pizca Nuez Moscada
- 1 cucharadita Pasta de Vainilla
- Opcional: Guindilla en polvo o jengibre en polvo para espolvorear la superficie.
ELABORACIÓN:
- Comenzamos poniendo en un cazo la leche y la nata, a velocidad media alta para que hierva. Movemos rápidamente con unas varillas para intentar espumarlo mientras se va calentando.
- Una vez hierva, añadimos la canela, el azúcar, la nuez moscada y el chocolate. Dejamos reposar un par de minutos y con las varillas integramos todo para que se mezcle y quede homogéneo.
- Servimos rápidamente en los vasos y espolvoreamos con la guindilla, el jengibre o incluso con canela o cacao.
- ¡Y ya está listo para disfrutar con churros, roscón o tal cual!
Como os decía, la receta es bastante sencilla, ¡no me podéis decir lo contrario! Con estas cantidades os da para unas 6 – 8 personas (depende del recipiente en el que lo sirváis).
Me encantaría que os animaseis a prepararlo para estos días tan especiales que estamos pasando. Y si es así, ¡no os olvidéis de contármelo!