La verdad es que desde que tengo amigos vegetarianos y veganos me da por pensar mucho más en este tipo de comida, así que de vez en cuando intento sacar algo así e ir experimentando con este tipo de cocina.
La receta de hoy es una milhojas de calabacín y zanahoria (aunque podéis incluir más verduras si os apetece), con puré de patatas y mermelada de tomate. ¡Espero que os guste!
INGREDIENTES (para 4 raciones)
- 1 Calabacín Grande
- 4 Zanahorias Medianas
- Puré de Patatas (550gr de Patatas, 275gr de agua, 35gr de aceite de oliva, pimienta, nuez moscada y 1 cucharadita de sal)
- Mermelada de Tomate
ELABORACIÓN
- Preparar el puré de patatas (cocer los 550gr de patatas ya peladas y troceadas en el agua con la sal, una vez estén hechas -aproximadamente 30min- se baten en una batidora de vaso o en la Thermomix y se le añade el aceite, la pimienta y una pizca de nuez moscada y se vuelve a batir).
- Mientras se cuecen las patatas se puede ir preparando el resto del plato.
- Pelar el calabacín y cortarlo en rodajas finas con ayuda de una mandolina (se puede hacer también con un cuchillo). Otra opción es lavarlo bien y dejarle la piel.
- Pelar la zanahoria y cortarla también en rodajas pequeñas, nuevamente con la mandolina o a mano con un cuchillo.
- Una vez estén listas las verduras se van pasando por la sartén con un poco de aceite. El calabacín se hará y se pondrá duro, la zanahoria se queda un poco hecha pero durita para mezclar diferentes texturas en el plato.
- Si aún no está, hay que terminar de hacer el puré y tenerlo cerca para montar el plato.
- Para el plato se pone en la base un cuarto del puré de patatas (si ha salido mucho se puede poner un poco menos) y luego se van montando las capas intercalando calabacín y zanahoria. Para finalizar se le pone por encima mermelada de tomate al gusto.
- Y ahora… ¡a disfrutar!
También se le puede añadir mermelada de tomates entre las capas y si sale demasiado puré se puede intercalar con las verduras o reservar como guarnición para otros platos o “aliñarlo” con un poco de cebollino o lo que prefiráis y tomarlo como una cena.
Ahora no tenéis excusa para probar un plato vegano con muchísimo sabor. ¿Quién se anima? 😉
[También podéis ver la receta aquí]